Aprendizaje inclusivo
Las oportunidades de aprendizaje de calidad deben ser accesibles para todos. La reducción de las desigualdades es un requisito previo para garantizar el derecho a una educación de calidad para todos, como se refleja en el ODS 4. Sin embargo, en general, el acceso a la educación favorece a quienes ya se han beneficiado de las oportunidades educativas. Los que tienen un déficit de conocimientos, habilidades y competencias son los que tienen más probabilidades de quedar excluidos.
El Instituto de la UNESCO para el Aprendizaje a lo Largo de Toda la Vida
- apoya el seguimiento de los marcos normativos y jurídicos
- proporciona conocimientos técnicos y apoyo para la creación de capacidad a los Estados miembros con el fin de que puedan desarrollar, adoptar e implementar políticas inclusivas y con perspectiva de género
- lleva a cabo investigaciones orientadas a la práctica a nivel nacional y subnacional para aumentar la disponibilidad de estadísticas y análisis desglosados sobre las desigualdades encontradas en el aprendizaje a lo largo de toda la vida;
- realiza investigaciones y pruebas sobre políticas y programas que apoyan la inclusión, la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer.
Nuestro enfoque
La agenda de Educación 2030 reconoce que la igualdad de género requiere un enfoque que «garantice no solo que las niñas y los niños, las mujeres y los hombres obtengan acceso a los distintos niveles de enseñanza y los cursen con éxito, sino que adquieran las mismas competencias en la educación y mediante ella». Sin embargo, a pesar de los importantes progresos realizados en muchas partes del mundo, la desigualdad de género sigue siendo un grave problema para la mayoría de los países.
La agenda de Educación 2030 reconoce que la igualdad de género requiere un enfoEn muchos entornos educativos, siguen existiendo grandes diferencias de género en lo que respecta al acceso, al rendimiento y la asimilación, la mayoría de las veces en detrimento de las niñas, aunque los niños también están en desventaja en determinadas regiones. La pobreza, el aislamiento geográfico, la condición de minoría, la discapacidad, los matrimonios y embarazos precoces, la violencia de género y las actitudes tradicionales sobre la condición y el papel de la mujer son algunos de los muchos obstáculos que impiden a las mujeres y las niñas ejercer plenamente su derecho a participar en la educación, completarla y beneficiarse de ella.
El Instituto de la UNESCO para el Aprendizaje a lo Largo de Toda la Vida trabaja para hacer realidad la igualdad de género en el aprendizaje a lo largo de toda la vida apoyando el desarrollo de marcos normativos y jurídicos adecuados, el asesoramiento político y la producción de conocimientos.
El UIL reconoce los riesgos de exclusión social que la digitalización supone para los adultos con bajos niveles de alfabetización, al tiempo que es consciente del potencial de la tecnología para satisfacer sus necesidades de aprendizaje, por lo que promueve la alfabetización digital. Abordamos las necesidades de los adultos y jóvenes poco alfabetizados a través de la Alianza Mundial para la Alfabetización en el Marco del Aprendizaje a lo Largo de Toda la Vida (GAL) y los proyectos asociados.
El UIL apoya a los Estados miembros en el diseño de políticas y programas para proporcionar habilidades básicas de aritmética y alfabetización junto con otras habilidades y competencias transversales, como las habilidades digitales, habilidades de alfabetización mediática y habilidades para la ciudadanía mundial. Ayudamos a los Estados miembros a hacer frente a las desigualdades sociales y de género y a permitir que los jóvenes y adultos poco alfabetizados accedan a trabajos dignos o tengan nuevas oportunidades de aprendizaje.
El cuarto Informe Mundial sobre el Aprendizaje y la Educación de Adultos (GRALE 4) puso de manifiesto que los refugiados, los migrantes y los desplazados internos se encuentran entre los que menos participan en la educación y la formación, así como entre los más desatendidos en términos de políticas. El UIL contribuye a revertir este abandono mediante la investigación y el trabajo, por ejemplo, sobre el reconocimiento, la validación y la acreditación (RVA) de los resultados del aprendizaje y las competencias. Mediante el desarrollo de recursos de conocimiento, herramientas políticas y servicios de apoyo, el UIL ayuda a los países de acogida a incluir a los refugiados y a los migrantes en los programas de aprendizaje a lo largo de toda la vida, protegiendo y defendiendo así los derechos de las personas que se desplazan, independientemente de su estatus.
El Instituto de la UNESCO para el Aprendizaje a lo Largo de Toda la Vida (UIL) se esfuerza para mejorar las políticas y prácticas educativas existentes en las prisiones, destinadas a apoyar la rehabilitación y la reinserción de los reclusos en la sociedad y contribuir así a que el derecho a la educación sea una realidad para todos.
Los cambios demográficos, combinados con el rápido desarrollo de la tecnología, hacen que la necesidad de seguir aprendiendo a lo largo de toda la vida sea más imperiosa que nunca. Las sociedades en proceso de envejecimiento deben encontrar formas de apoyar a los adultos de edad avanzada para que se adapten a las nuevas tecnologías que están cambiando el panorama laboral y el mundo. Debemos garantizar que las personas mayores sigan siendo miembros activos de la sociedad y contribuyan a nuevas formas de solidaridad y aprendizaje intergeneracional.